Solo era un sueño

Reflexiones en tiempos de pandemia, decisiones y situaciones graciosa y de estrés, todo en un solo lugar y en una simple leída.

fragilidad del ser humano en tiempos de Pandemia


La vida normal pasaba y nuestros días eran iguales, la cotidianidad del trabajo, la familia, los eventos sociales, las planificación del verano, las cervezas con los colegas y el quejarse, como humanos que somos, de absolutamente todo.

Un día llegó el rumor que una pandemia nos acechaba, pero como todo estaba sucediendo en China, pensábamos, bah! somos inmunes no llegará jamas aquí, y fue entonces, que los parques tenían mas niños paseando con los abuelos, que no faltaban mitines políticos y manifestaciones de reivindicación de muchos congregados, y aun mejor, mas abrazos y amor del que se había dado nunca antes.

Como todo parecía un rumor seguimos con nuestra vida haciendo chistes de que teníamos el corona y besábamos y abrazábamos a todos, continuando con ese humor tan característico de los imbéciles y poco pensantes que somos los seres humanos, sobretodo en momentos de peligro inminente. 

Y fue así, como llegó el día en el cual se cierran colegios, universidades, escuelas y academias; los niños contentos pues unas vacaciones en primavera vienen genial para descansar un poco sobretodo con el buen tiempo; los abuelos y los peques todos reunidos en los parques compartiendo, y aquí y justo aquí, es que sucede la hecatombe. España se ve reflejada en el espejo de Italia con cada día mas casos, fallecidos y creciendo en contagios; la salud pública colapsada y por fin despertamos del sueño profundo y empezamos a entender lo que estaba por venir la crisis sanitaria mas grande del mundo luego de la gripe Española en 1918 la cual se calcula que afectó a más de 500 millones de personas y provocó la muerte de unos 50 millones de habitantes, entre el 3 y el 5 por ciento de la población mundial en esos años.

Allí el mundo se detiene, cierran todos los negocios y declaran una cuarentena, se bloquean las carreteras y aun así no somo capaces de contener lo que nos viene: calles desoladas, negocios cerrados y el miedo apoderándose lentamente de todos nosotros, ya no hay más abrazos, más contacto con los seres queridos.solo a través de vídeo llamadas, no mas juegos al aire libre para los niños y ahora lo que tenemos es paranoia, nerviosismo y miedo al contagio, ahora no queremos salir a la calle charlar con nuestros vecinos, tocar nada, para nosotros ahora mismo una vida normal es algo que desconocemos.

Mi pregunta claramente es: ¿qué habría pasado si a principio de marzo se hubieran tomado estas medidas? para mi nada debía cambiar. solamente conservar la vida de tantos héroes anónimos que fallecieron por nuestra irresponsabilidad.
Este es un episodio necesario para que seamos conscientes de lo que es realmente importante en el mundo, la salud, la familia y nuestros planeta sin fronteras. Todos pertenecemos a un solo mundo, todos somos seres humanos del mismo, sin importar la nacionalidad, raza, creencias entre otros. Y todos tenemos el derecho de estar seguros y de igualmente cuidar de los otros.

Despierta! Despierta! la pesadilla acabará, pero no me refiero a la pandemia, me refiero a la apatía por el otro, la incredulidad, el sentirnos infalibles e inmortales, ese es el sueño del cual debemos despertar ya.

Riamos juntos y aprendamos de esta experiencia única e irrepetible, y trabajemos unidos para sobrellevarla, y superarla. Y no repitamos los viejos patrones, colaboremos para hacer de este mundo, un sitio mejor para todos.

Comentarios

Entradas populares